slide-page-768-d42b10

El castillo de Joux – Toussaint Louverture en Pontarlier (Doubs):

«Mirando atrás, en Santo Domingo solo hemos derribado el tronco del árbol de la Libertad de los Negros, brotará de nuevo por las raíces porque estas son profundas y numerosas»
Toussaint Louverture, Santo Domingo 12 de junio de 1802.

En el corazón del macizo del Jura, en la frontera suiza, el fuerte de Joux esconde los restos de Toussaint Louverture, líder de la insurrección de los esclavos en Santo Domingo, impulsor de la primera abolición de la esclavitud y precursor de la independencia de Haití, primera república negra. Encerrado bajo la orden de Bonaparte, falleció el 7 de abril de 1803. 




Historia:

Toussaint Louverture nació esclavo el 20 de mayo de 1743 en la plantación de Breda en la cima del Cabo en la colonia de Santo Domingo, donde ocupa diversas funciones antes de ser emancipado hacia 1776.

En vísperas de la Revolución Francesa los dos tercios del volumen de negocios de las colonias francesas se alcanzaron en Santo Domingo.

Sobre el equivalente de tres departamentos franceses, 30 000 plantadores que administraban 8500 empresas y 50 000 hombres de color libres explotan una situación económica floreciente en la que 500 000 esclavos se encargan del trabajo y son excluidos de la prosperidad.

Mapa de Santo Domingo


Instaurando el principio indivisible de la libertad y de la igualdad, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano proveniente de la Revolución Francesa iba a tener una repercusión incalculable en la sociedad colonial.

En la noche del 22 al 23 de agosto de 1791 durante la famosa ceremonia del Bosque Caimán, se reúnen bajo la autoridad de Boukman y de los responsables vudús, algunos miles de esclavos. Es el comienzo de la insurrección general de los esclavos del norte. Fue en noviembre cuando el negro Toussaint, descendiente de un alto dignatario del reino de Allada en el actual Bénin, nacido en 1743 en la plantación de Breda y emancipado en 1776, se une al movimiento insurreccional. Fue al mando de una tropa de 3000 hombres aliados de España cuando dio sus primeros pasos.

No pudiendo reprimir la sublevación de los esclavos y frente a los nuevos peligros abiertos en las fronteras de la colonia por la guerra con Inglaterra y España, el comisario Sonthonnax para unirse a los negros de la República proclama el 29 de agosto de 1793 la abolición de la esclavitud en la colonia de Santo Domingo. Esta decisión se confirma el 4 de febrero de 1794 por la Convención nacional que la extiende a todas las colonias francesas.

Esta decisión trae de vuelta al campamento de la República a Toussaint Louverture, que en unas semanas acaba con las tropas españolas. En octubre de 1795, el Directorio lo nombra General del ejército francés y en 1797, general jefe de los ejércitos de Santo Domingo. En 1798 los ingleses vencidos fueron obligados a evacuar la isla y el tratado firmado entre Toussaint Louverture y el general inglés Maitland es como dirá Aimé Césaire «el primer acto de la independencia de Haití».

En enero de 1801, Toussaint Louverture manda a ocupar la parte española de la isla y promulga una constitución que hace de Santo Domingo una colonia autónoma de la cual es gobernador de por vida.

En la metrópolis, la presión del lobby esclavista impulsa a una vuelta al orden antiguo y la paz de Amiens permite a Bonaparte enviar un cuerpo expedicionario de 25 000 hombres dirigido por su cuñado, el general Leclerc, para abatir el poder de Louverture que llega en enero de 1802.



La noticia del restablecimiento de la esclavitud (20 de mayo de 1802) provoca la resistencia a ultranza. Se emprende entonces una dramática campaña que va a someter a fuego y sangre a los puertos, las ciudades y los campos. Invitado a una convención de paz y amnistía, Toussaint Louverture es arrestado. Detenido, es embarcado en el buque «le Héros» que zarpa hacia Francia, llega a la rada de Brest el 9 de julio. El 13 de agosto, es trasladado al fuerte de Joux, al que llega el 23 de agosto de 1802.

La desaparición de Toussaint no devuelve la calma. La situación de las tropas francesas no para de empeorar, la fiebre amarilla más que la guerrilla causa estragos en el cuerpo expedicionario.

La reconciliación de los líderes negros Pétion y Dessalines, precipita el desastre de las tropas francesas que se rinden el 19 de noviembre de 1803 en Vertières y abandonan Santo Domingo para siempre. Los líderes del ejército indígena cambian el nombre de Santo Domingo por el nombre caribeño de Haití y el 29 de noviembre de 1803, «en nombre de los Negros y hombres de color, la independencia de Santo Domingo es proclamada. Volviendo a nuestra libertad primitiva, hemos asegurado nuestros derechos; juramos no ceder a ningún poder la tierra...». Se confirma el 1 de enero de 1804.

Así nacieron, de la primera y única revuelta victoriosa de esclavos, la primera colonia indígena independiente y la primera República negra en la historia de la humanidad: Haití, allí donde «por primera vez, la negritud se puso de pie» dirá Aimé Césaire.

Toussaint Louverture no vio este resultado. Fue el vencedor póstumo. Minado por la enfermedad, aislado en un calabozo riguroso del fuerte de Joux, falleció el 7 de abril de 1803.

Napoleón conoció su primera gran derrota en Santo Domingo. En 1817, en el memorial de Santa Elena reconoció su derrota: «El problema de Santo Domingo ha sido una gran tontería de mi parte. Es el mayor error que he cometido en administración. Debería haber tratado con los líderes negros como con las autoridades de una provincia, dejar como virrey a Toussaint Louverture».

Celda de Toussaint Louverture en el fuerte de Joux


Bonito homenaje del «Napoleón Blanco» al que Châteaubriand apodó el «Napoleón Negro».

«Cuando el negro Toussaint irrumpió por primera vez en la escena política «muchos movimientos de emancipación estaban naciendo: movimiento de los colonos blancos hacia la autonomía y la libertad comercial, movimiento de los mulatos hacia la igualdad social, movimiento de los Negros hacia la libertad sin más.» Cuando Toussaint Louverture vino, fue para continuar, unir y acabar estos movimientos, para mostrar que no hay raza paria, que no hay país marginal, que no hay pueblo de excepción. Le habían legado grupos de esclavos. Él había formado un ejército. Le habían dejado una jacquerie. Él había hecho una revolución. Le habían dejado una población. Él hace un pueblo. Le habían dejado una colonia, él hace un Estado, mejor una Nación» (Aimé Césaire).

Cuadro de la independencia

Cuando Toussaint-Louverture abandonó la tierra de su patria para desaparecer para siempre, él dijo mientras embarcaba en el buque francés que lo llevaba hacia el fuerte de Joux, estas palabras proféticas:

«Derribándome, en Santo Domingo solo hemos derribado el tronco del árbol de la Libertad de los Negros, brotará de nuevo por las raíces porque estas son profundas y numerosas»

En el corazón del macizo del Jura, el castillo de Joux esconde los restos de Toussaint Louverture. Es actualmente un lugar de peregrinaje y uno de los monumentos de la memoria del mundo Negro.

Hoy en día es propiedad de la Comunidad de Comunas de Larmont, es objeto de un amplio programa de restauración arquitectónico y de valorización cultural y turística en el cual se inscribe el memorial Toussaint Louverture en honor del que la historia a denominado «el Primero de los Negros».