Historia:
Retrato de Leger-Félicité Sonthonax
A su llegada, el 18 de septiembre de 1792, Sonthonax decide entonces aliarse con los libres e impone así su autoridad a la fuerza. Pronuncia la disolución de la asamblea colonial exclusivamente compuesta por blancos. Durante su entrada a Puerto Príncipe, la capital, en abril de 1793, exilia a varios colonos blancos que no aceptan la igualdad con los libres de color. Igualmente, consiguió contener la insurrección de los esclavos del norte, cuyos líderes se refugian en la parte este de la isla, por entonces colonia española.
La guerra contra Inglaterra y España en febrero de 1793, después de la ejecución de Louis XVI, presentó un nuevo problema para los comisarios civiles. En unos meses, la parte más grande de Santo Domingo fue ocupada y numerosos colonos se aliaron a uno u otro país, emigraron o cogieron las armas. En junio, Galbaud, el nuevo gobernador monárquico, sostiene un motín de blancos en Cabo Haitiano.
Sonthonax y Polverel deciden entonces apoyarse en los negros. El 21 de junio, proclamaron la libertad para todos los esclavos que lucharían por la República. Manadas de esclavos contestatarios invaden e incendian El Cabo. Galbaud huye con miles de blancos.
El 29 de agosto de 1793, Sonthonax toma una medida radical, que representa uno de los sucesos más importantes de la historia de las Américas; decreta la abolición general de la esclavitud en la provincia del Norte (acompañada sin embargo del deber de retomar el trabajo en las plantaciones para aquellos que no combaten). En su decreto, afirmó que su misión era «preparar gradualmente, sin sufrimiento y sin sacudidas, la liberación general de los esclavos».
Proclamación de la abolición el 29 de agosto de 1793.
Un poco más tarde, el 21 de septiembre, Polverel abolió la esclavitud en el oeste y el sur. El 4 de febrero de 1794, la Convención ratifica la decisión de Sonthonax en el entusiasmo y la extiende a todas las demás colonias francesas.
Los esclavos no se unieron inmediatamente a Sonthonax, que debe convencer a los líderes de los esclavos contestatarios del norte de unirse al campamento republicano. No fue hasta principios de mayo de 1794 que Toussaint Louverture y sus cuerpos disciplinados y aguerridos se unieron a él.
Los partidarios de los colonos en París aprovecharon para defender contra la arbitrariedad de los comisarios civiles ante la Convención. Habiendo atraído contra ellos a una parte de los convencionales que tenían intereses en las islas, Polverel y Sonthonax fueron acusados. Después de recibir su orden de comparecencia, tuvieron que abandonar la isla el 14 de junio de 1794.